lunes, enero 16, 2006

 

Libros: Esas cosas de papel que no son de doble capa

Hoy voy a sorprenderos hablando de un tema cultural, si, por increible que parezca uno tiene cultura, incluso más de la necesaria para distinguir entre el bote del gel y el de champú, he estudiado (risas de fondo) en los mejores colegios de pago y cualquiera que lea mi blog va a pensar que solo se hablar de películas, de videojuegos y de tíos, pues además se leer y escribir, y vosotros diréis, ' no te jode, sino como ibas a tener un blog!' pero nadie ha pensado en que podría haber adiestrado un mono para que escribiese lo que voy diciendo y confiar ciegamente en lo que él escribiese (eso explicaría muchos posts), asi que hoy voy a escribir sobre los libros para demostraros mi amplia cultura.

Los libros son esas cosas generalmente rectangulares (o con forma de cualquier rastrojo o alimaña en caso de ser infantiles) que se tienen en las casas colocados en estanterías, suelen ser de papel (o de cartón o de plastico o cualquier otro material tóxico en caso de ser infantiles) que cuantan una historia en sus páginas (aunque realmente no cuentan nada porque no dicen ni pio, a no ser que sean infantiles que en cuyo caso pueden hacer incluso muuuu! en un arranque de genialidad tecnológica).

Cuenta la mitológía Nórdica que en la antigüedad los libros servían... para leer!!! Pero por Dios! Estos nórdicos no me extraña que se hayan dedicado a hacer edredones porque está claro que tenían la cabeza llena de plumas. Todos sabemos que un libro tiene muchas funciones mucho más trascendentales que ser leido.

Un libro sirve para mucho más, sirve para que parezcamos más inteligentes, haced la prueba, poneros en la parada del autobús con la mirada perdida en el horizonte, la gente pensará que váis fumaos, ahora hacedlo sujetando un libro, no hace falta que este abierto siquiera, pero eso si, que sea tocho y con un título como "la metafísica hiperbolica de la aplicación atemporal del cosmos" ¿a que ahora os miran diferente? ya no estás fumao, estas meditando sobre el sentido de la vida. Más pruebas, llegas a una casa y lo más parecido que ves a un libro es el de las páginas amarillas, ya da igual que el habitante de la casa tenga un master en física termonuclear que ya te va a parecer un paleto de por vida, es triste pero medimos a las personas por la cantidad de libros que tienen, da igual que sean las memorias de Belén Esteban, ¿me entiendes?, la cosa es tener muchos para que la gente no se pare a leer los títulos, por eso me he hecho del Círculo de lectores, para parecer 400 páginas más inteligente cada dos meses.

Otro uso de los libros es como contenedor de polvo, no hay nada en este universo que atraiga más polvo que un libro, da igual que el libro solo lleve un par de horas en la casa, si lo miras con luz ultravioleta verás que genera un vórtice interdimensional que atrae el polvo, son como las balletas de la tele, ¡Esos anuncios los deberían hacer con un libro! "Yo paso el Pronto y tu 'La Metamorfosis de Kafka'" aunque bien mirado, los que hicieron ese anuncio eran unos visionarios, porque el Pronto al fin y al cabo es también una revista, que son como el hermano bastardo de los libros, son curiosas las revistas, sobre todo las del corazón, a estas les pasa lo contrario que a los libros, todo el mundo las lee pero nadie lo reconoce. Yo viendo la facilidad de los libros para acumular polvo estoy planteandome seriamente que cuando me muera metan mis cenizas en un libro.

Hay un uso que no entiendo del todo, debe ser porque soy un tío, que es el de guardar flores, una vez pregunté a mi hermana que porqué lo hacía y me dijo 'para conservarlas'... pero tu has visto una flor de esas! Estan oscuras, deformadas, huelen raro y estan resecas, joder, si estan momificadas! Claro, por eso los egipcios inventaron los sarcófagos, porque no tenían libros donde conservar los faraones, con esa manía de escribir por las paredes pues no se conservaban bien tu has intentado conservar una flor entre dos losetas, no queda bien, si hubiesen tenido libros en vez de pirámides habrían construido librerías, sería como las páginas amarillas pero en vez de teléfonos y direcciones pues serian de faraones.

Otro uso muy bonito de un libro es para reconoceros en una cita a ciegas, le dices llevaré un libro, esto lo haces para tirarte el rollo y piense que eres un intelectual, da igual que el último libro que leiste fuera el 'Micho 1', tú bajas y compras un libro para la cita, podrías haber dicho que llevabas cualquier otra cosa más llamativa, una bata de cola, un tricornio, las luces del árbol de navidad... aunque he de reconocer que el libro es mucho más elegante, hay otra cosa que tambien se usa en estos casos, una flor, aunque para las flores decir que la llevarás para que te reconozcan debe ser como una sentencia de muerte, porque sabe que si las cosas salen bien pasará la eternidad momificada en las memorias de Belén Esteban.

Hay muchos otros usos que le damos a un libro que no voy a comentar como tope de puerta, pisapapeles, nivelar mesas, etc. Pero estos usos no son usos propios de un libro, esto lo puedes hacer con cualquier cosa, una caja, un rolex de oro, un gato o incluso un faraón momificado, no son usos exclusivos de un libro. Pero probad a quedaros en la parada del autobús sujetando un faraón momificado, a que nadie os mira como si fuerais inteligentes, a que no?

Probad a leer algo impreso para variar, que con un libro en pdf no podéis momificar flores.

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